El Imperio Romano deriva del latín Imperium Romanum, cuya transcripción textual es “la posesión de los romanos”, un concepto que se define como la etapa histórica en la que la capital italiana fue dirigida a través del sistema de gobierno autócrata. Es la tercera fase de la civilización romana que resaltó por los fuertes rivalidades incrementados por el ansia de obtener todo el poder económico y político.
Octavio César Augusto fue el primer emperador del Imperio Romano, quien llegó a un acuerdo, batalló y ganó haciéndose con el poder romano, un suceso que cambió la historia del país haciendo que su mandato originase el cambio de pasar de una República a un Imperio Romano.