Leer es una actividad que sirve para el conocimiento, el entretenimiento o el desarrollo de la memoria, por eso todos los individuos a lo largo de su vida han leído muchos textos pero no todos son iguales ya que hay una diversa variedad. Entre ellos se encuentra el texto argumentativo que se define como aquel que muestra una hipótesis sobre algún tema, cuestión o posición apoyado en argumentos o razonamientos.
Para ello se necesita que el escritor sea capaz de convencer al lector a través de la manifestación de distintos puntos de vista que pueden ser en contra o a favor sobre el tema en cuestión, un texto que se crea mediante la lógica y que se fundamenta en premisas.
En resumen el texto argumentativo se apoya en un tipo de redacción que pretende persuadir al lector y para indagar un poco más en este tipo de texto se van a mostrar algunas de las características.
Finalidad del texto argumentativo
El texto argumentativo se emplea para poder convencer, es decir, conseguir que el lector se sume al razonamiento que el emisor está mostrando, siendo éste quien tiene en su poder lograrlo a través de distintas herramientas para realizar la argumentación que va a crear esa persuasión.
Claridad y objetividad del texto argumentativo
Es imprescindible que este tipo de texto esté ligado a los términos claridad y objetividad ya que sí se expone un saber, una firmeza y un dominio sobre el tema que está tratando el texto. Por este motivo es fundamental que se utilizen alusiones o citas de diversos expertos, datos o ejemplos confirmados e interrogaciones retóricas, así los argumentos del emisor van a estar afianzados.
Hechos e hipótesis
Todos los textos argumentativos giran entorno a una o varias tesis, una idea fundamentada en lo que el redactor piensa y quiere evidenciar, rebatir o dejar en duda. Para ello utiliza el argumento que es un proceso con una agrupación de procedimientos coherentes y organizados que deben ser examinados y también el razonamiento que es un conjunto de métodos en el que el emisor muestra sus argumentos.
Estructura del texto argumentativo
- Introducción: En esta etapa se enseña la hipótesis que se va a desarrollar en el texto de manera muy global.
- Desarrollo: En esta fase se manifiestan los argumentos de manera ordenada que sirven para aprobar o rechazar la hipótesis.
- De autoridad: La fuente es creíble, por ejemplo, un experto o un testigo.
- De ilustración: Emplear ejemplos reales para afirmar lo mostrado.
- Por lógica: Muy sencillo, relacionar la causa con la consecuencia.
- Conclusión: En esta etapa el emisor vuelve a manifestar su punto de vista de manera resumida para poder reforzarlo y aproximarlo un poco más a la objetividad.
Aspectos formales del texto argumentativo
Por último, en el texto argumentativo se escribe de manera impersonal y con un vocabulario preciso y formal, no es habitual repetir vocablos sino que se utilizan los sinónimos y se emplean mucho los conectores para que el texto tenga un sentido coherente.