El desierto se define como un bioma que cubre aproximadamente una quinta parte de la superficie del planeta Tierra y que se caracteriza por un clima árido y con escasas precipitaciones, lo que complica la supervivencia de los seres vivos. De todas formas, en este bioma sí que existen seres vivos, los cuales están adaptados a zonas de sequía y aridez, y para ello utilizan técnicas como la dieta de criaturas con tejido húmedo y el movimiento de torsión rápido.
Algunos desiertos están entre las últimas áreas de la superficie terrestre totalmente salvajes y sin explorar, pero eso no quita que se conozcan otros como los del norte de África, las zonas áridas de Arizona y los del oeste del continente asiático, teniendo como desierto más destacado el del Sahara, que se extiende desde el mar Rojo hasta el océano Atlántico.
¿Quieres conocer distintas características del desierto? Te animamos a que sigas leyendo este artículo.
Relieve muy diverso
El desierto se conoce por el intenso sol y la arena, sin embargo, hay alguno que puede ser frío. Si nos detenemos en el relieve, este se caracteriza por lo siguiente:
- Planicies o llanuras: grandes extensiones de tierra que no presentan fuertes desniveles, aunque pueden tener ondulaciones debido a las dunas.
- Dunas: montículos de arena que poseen unas capas suaves y uniformes, las cuales se conforman gracias al viento.
- Salinas: formaciones naturales que años atrás fueron lagos o estanques de agua salada y que actualmente están secas.
Posee 3 zonas climáticas
- Semiárida o esteparia: presenta precipitaciones escasas con una media de 500 y 800 mm, y se encuentra a menudo al margen del desierto subtropical.
- Árida: se caracteriza por su sequedad al contener una media de 25 a 250 mm de precipitaciones anuales y por el contraste de temperaturas entre el día y la noche.
- Hiperárida: este es el clima más extremo, ya que normalmente no suele llover en años o incluso puede no hacerlo jamás. Este solo representa un 4% en la superficie del planeta Tierra, incluyendo los desiertos de los polos y el centro del desierto cálido.
La temperatura en el desierto cálido suele ser extrema, ya que supera los 50 ºC durante el día y los -10 ºC en el transcurso de la noche, mientras que en el desierto polar se mantiene en márgenes muy inferiores a 0 ºC.
Flora relativamente escasa
No abunda la flora en el desierto, pero sí que hay plantas que se adaptan al calor estival y a la sequedad gracias a los troncos cortos y gruesos y raíces profundas. Algunas de las plantas más habituales son:
- Ágave o maguey.
- Yuca de dátiles.
- Árbol de Josué.
- Cactus órgano o chilayo.
Sorprendente fauna desértica
Las extremas condiciones climatológicas han provocado que pocos animales sean capaces de adaptarse en el desierto.
Los que más abundan son reptiles como las serpientes, insectos como las hormigas y arácnidos como los escarabajos. No debemos olvidar a los mamíferos que poseen una envergadura notable, los cuales suelen hacer vida nocturna, ya que por el día están en sus madrigueras.
- Osos hormigueros.
- Coyotes.
- Chacales.
- Ratas.
- Suricatos.
