El vocablo empresario tiene origen en la época medieval francesa, momento en el que se conocía como entrepeneur a aquella persona que se encargaba de todos los factores de producción, es decir, la labor de los siervos, los materiales y los recursos del señor feudal. Actualmente, un empresario es aquel que se centra en elaborar el plan estratégico, teniendo que implantar ciertas normas para conseguir los objetos y organizar la administración.
Esta persona tiene que tener conocimientos, contactos y niveles de innovación y creatividad muy elevados con el fin de conseguir un nicho de mercado para aumentar las ventas, la producción, los nuevos avances, e incluso, las ganancias.
Si quieres saber las características de un gran empresario sigue leyendo este artículo.
Capacidad de detectar oportunidades
Un gran empresario es aquel que sabe bien cuando se le presenta una oportunidad de negocio y para ello es fundamental que la persona en cuestión esté bien informada de las novedades y los cambios que se producen en el sector.
Capacidad de innovar o crear
Un empresario exitoso es el que se centra en la producción de nuevos productos o servicios para satisfacer a sus clientes actuales o a los potenciales. Para conseguir esto es importante que la persona en cuestión utilice las estrategias de producción y comercialización, además de no tener miedo a realizar cosas totalmente distintas.
Tomar de decisiones acertadas
Tomar las decisiones acertadas tiene que ver con conseguir un beneficio para la empresa, por lo tanto, si tiene la opción de tomar una decisión que viene económicamente mejor a la empresa pero a nivel personal no está de acuerdo, debe de velar por el crecimiento de la empresa.
Capacidad para tomar riesgos calculados
Un gran empresario se centra en reunir la máxima información posible para que a la hora de tomar riesgos sean con el mayor grado de certidumbre posible. Eso sí, tampoco es capaz de quedarse sin hacer nada, más bien busca un equilibrio entre ambas opciones.
Confianza en sí mismo
El empresario es seguro de sí mismo y eso hace que crea en el proyecto que está llevando a cabo y del cual tiene una visión de futuro. Tiene una gran capacidad de análisis y eso hace que detecte fácilmente los problemas, además utiliza su sentido de la observación y da un paso hacia adelante en las situaciones que ve conveniente.
Organizar y planear
Todo empresario exitoso comienza su día bajo una rutina que fue organizada anteriormente, por eso siempre tiene su agenda actualizada y ve cuales son los objetivos a cumplir ese día, esa semana o ese mes. Se centra en elaborar planes financieros y estrategias de publicidad y ventas, además de llevar un control exhaustivo de la contabilidad electrónica.
Mirada multidimensional
Un gran empresario está buscando optimizar el proyecto que está llevando a cabo a través del análisis de su propio negocio, lo que provoca que tenga una mirada multidimensional.
Se centra en evaluar a los empleados, observar el nivel de satisfacción de los mismos y calcular algunos posibles cambios en el sector, tanto a nivel nacional como internacional.