Nicolás Copérnico es un monje astrónomo que nació el 19 de febrero de 1473 y falleció el 24 de mayo de 1543, y durante esos años destacó por formular la teoría heliocéntrica, la cual aseguraba que el planeta Tierra no es la que ocupaba el eje central sobre la que giraban los demás astros, más bien era la estrella de tipo-G. Para dar con esta teoría, primero estudió matemáticas, derecho, filosofía, ciencias y astronomía entre otras disciplinas, aunque fue esta última en la que más indagó.
Sus estudios tuvieron un gran impacto en el mundo en aquella época y eran opuestos a las ideas aristotélicas que mantenía la Iglesia, sobre todo a la teoría del geocentrismo, lo que llevó a la célebre frase de que “la ciencia venció a la teología”.
A continuación te mostramos las características de este clérigo polaco conocido como Nicolás Copérnico.
Teoría heliocéntrica del universo
La teoría heliocéntrica la desarrolló durante unos 25 años, teniendo en cuenta que retomó la idea sobre la que había indagado el astrónomo y matemático griego Aristarco de Samos.
Copérnico propuso los siguientes postulados:
- Los astros se mueven en círculo y son totalmente uniformes.
- El centro del Universo es aquel en el que se encuentra el Sol.
- Alrededor de la estrella tipo-G orbitan los planetas, aunque aún no se habían descubierto los planetas exteriores (Júpiter, Saturno, Urano y Neptuno).
- Las estrellas se describen como objetos distantes y fijos, además no orbitan alrededor del Sol.
- La Tierra se caracteriza por tener 2 tipos de movimiento: rotación y traslación.
- La distancia que hay entre el Sol y el planeta Tierra es mucho menor si se compara con la distancia entre la Tierra y el resto de las estrellas.
Modificación de la teoría de la gravedad
Hasta ese momento se manifestaba que el centro del universo era el planeta Tierra, lo que equivalía a que el centro de gravedad también fuese dicho planeta.
Llegó el momento en el que se rechazó dicha idea, pero ¿por qué las cosas dentro del planeta Tierra caen hacia su centro? La respuesta a esta pregunta la consiguió Nicolas Copérnico, por eso se dice que aportó mucho a la ciencia.
Toda la materia tiene su propia gravedad, entonces las que más pesan atraen y son atraídas por materias que son similares en cuanto al peso, de la misma forma que las materias pequeñas son atraídas por las más grandes.
Estudio y saber de las lenguas antiguas
El Renacimiento fue una época en la que el aprendizaje de la lengua griega fue una de las cosas más destacadas y eso también le llegó a este astrónomo en Bolonia en 1492.
Copérnico se centró en el latín, por eso fue capaz de traducir a dicha lengua las cartas del historiador bizantino Teofilacto Simocates.
Cabe señalar que tenía un buen nivel de lectura, lo que le sirvió en sus estudios sobre diversos conocimientos de astronomía, ya que muchas de las obras de los astrónomos griegos aún no se habían traducido al latín.